En Bogotá se ha evidenciado una problemática sin notable mejoría de consumo y expendio de drogas fuera de algunos colegios del distrito, guiados por esta preocupación se realizo una salida de campo que nos permitiese entender la problemática de una forma mas cercana y que piensan los ciudadanos (padres de familia, profesores y administrativos) a cerca de esta, y esto fue lo que se pudo evidenciar:
Se
pudo ver que la mayoría de la población cercana a esta problemática, es decir
los profesores, directivas, vendedores de la calle y de establecimientos
cercanos al colegio, si tiene conocimiento sobre ella y además la han
presenciado. Esto se puede deducir según los resultados arrojados de la
encuesta en donde el 65.3% de los encuestados afirmaron conocer o evidenciar la
problemática, de la venta y consumo de drogas dentro de los colegios, mientras
que el otro 34.7% negaron conocer acerca de esta problemática.
Además
de afirmar que la mayoría de la población haya evidenciado la venta y consumo
de drogas en los colegios de La concordia y La escuela nacional de comercio,
afirmaron estar de acuerdo con respecto a la existencia de una influencia por
parte de vendedores externos para la compra y venta de sustancias psicoactivas
a las afueras del colegio, y que muchos de estos vendedores son a veces los
mismo colegiales que influencias a sus compañeros. Esto se puede corroborar
según los resultados arrojados por las encuestas realizadas, en donde el 60.8%
de la población afirmaron creer en la presencia de los vendedores externos, en
cambio el otro 39.1% no cree que exista esta presencia.
Por
otro lado, se quiso saber la opinión de los vendedores ambulantes y establecimientos
cercanos, como de las directivas y profesores con respecto a la problemática
planteado, en donde se obtuvo que se encuentra una gran inconformidad, ya que
la mayoría de la población, la cual sería el el 32,6% creen que debería haber
más control por parte de la policía hacia los vendedores, y acompañamiento de
los padres a los niños, ya que el 13,0% de la población considera el papel de
los padres como un factor fundamental para evitar el consumo y la venta de
drogas, o como también lo llama el 8,6% de la población, el microtráfico. Como
consecuencia de lo anterior, el 15,2% de la población opinó, que se crea
inseguridad en la localidad de la candelaria, la cual según la encuesta es
considerada por el 19,5% de la población como un lugar turístico e influyente
para el microtráfico.
Siguiendo
con el objetivo de la encuesta, se quiso saber si creían que esta problemática
estaba recibiendo la debida ayuda por parte de la alcaldía local o los entes de
control, de lo cual, la mayoría, el 69,5% para ser más específicos,
respondieron negativamente evidenciando así la poca atención e interés que se
ve por parte de estos entes de control. Aquí entraría también la falta de
cumplimiento del deber que se ve por parte de los policías encargados de
controlar estas clases de situaciones. Así mismo se les preguntó acerca de su
conocimiento sobre el papel que desempeñaba la Alcaldía Local y el JAL, en
donde el 47,8% de la población respondió que no cumplía ningún papel con
respecto a la problemática, y el 8,6% de la población, no sabía que se supone
que tenía que hacer la alcaldía o no sabía que existía la Alcaldía. Sin
embargo, el 21,7 % de los encuestados han visto que se han hecho intervenciones
policiales por parte de estas instituciones, y además tanto el 13,0 % como el
4,3% y el otro 4,3% creen que estas instituciones han presentado ayuda y han
cumplido con su deber brindando seguridad, organizando charlas de orientación e
interviniendo, respectivamente.
Además
de lo anteriormente mencionado, hablando un poco más en cuanto a las estrategias
evidenciadas o propuestas por la población entrevistada, se puede analizar en
una primera instancia que, en cuanto a las estrategias que han sido observadas
por esta población, la mayoría de la misma no ha evidenciado alguna estrategia
desarrollándose, o por otra parte solo se evidencia la presencia de algunos policías
o el desarrollo de unas cuantas charlas. Analizando de esta manera, como la Alcaldía
Local junto con la JAL, no está ejerciendo por completo su labor, ya que a
pesar de haberse observado que se han llevado a cabo algunas charlas y espacios
de orientación, estas no son constantes y la solución que plantea la Alcaldía,
se lleva por el camino sencillo, el cual hace referencia al establecer unos
cuantos policías para el control de toda la zona.
También,
se puede observar también como la mayoría de la población opina que dicha
estrategia de ubicar uno o dos policías en el sitio denunciado no es suficiente
para lograr erradicar esta problemática, ya que como algunos habitantes
comentaban, la policía ayudaba a desalojar a algunos de los vendedores, pero en
seguida, llegaban otros expendedores diferentes, haciendo que esta problemática
continúe. Pasando por el mismo ciclo con las charlas de prevención presentadas,
a causa de las pocas que se llevan a cabo, como se planteó anteriormente,
dejando está en una simple charla, sin generar un verdadero impacto en la
comunidad.
Es
por esto, que la misma comunidad plantea que algunas de las estrategias que deberían
ser aplicadas por parte de la Alcaldía Local, podrían referirse a una mayor
vigilancia, control y seguimiento por parte de las autoridades, de dicha
problemática, tomando dicha propuesta, no como el establecimiento de ciertos
entes policiales, sino el seguimiento de los expendedores y sus mecanismos de
ventas, para lograr llegar a erradicar de modo permanente dicho fenómeno,
planteando a su vez, poder incentivar la recreación para los estudiantes,
implementando de este modo, la verdadera presencia de la Alcaldía correspondiente
y el correcto ejercer de su deber de garantizar el bienestar de la comunidad,
bienestar que en el momento no está presente a causa de la falta de atención de
este ente gubernamental en dichos temas coyunturales.
Mostrando
de esta forma, como la mayoría de las personas entrevistadas, opinan que dicha
problemática tan presente en la zona en la que habitan, debe ser tomada en
cuenta por parte de la Alcaldía y de la JAL, ya que es una problemática lo
suficientemente relevante, para merecer prestar atención a la misma, y además
de esto, el ejercer el verdadero deber, explicado anteriormente, y no escudarse
en propuestas de proyectos que no serán llevados a cabo, ya que, como nos
comunicaron los encuestados, ellos son los únicos, los cuales pueden ejercer el
poder suficiente para asegurar la vida sana de sus hijos e hijas.
Finalmente
a modo de crítica, planteado por la línea de trabajo, teniendo en cuenta
también, algunos de los análisis realizados gracias a la observación y estudio
de ciertos aspectos evidenciados, se logra proponer un debate en una primera instancia,
acerca de la posición observada del colegio La Concordia, junto con el
testimonio de una egresada del mismo colegio, en el cual la joven contaba como
se daba la falta de disciplina en dicho colegio, a causa de la falta de
presencia del mismo rector en problemáticas como la presentada, lo que se pudo
evidenciar al momento de ingresar al colegio con el permiso indicado y recibir
la respuesta negativa del mismo, haciendo ver de este modo como además de no
existir atención de la Alcaldía Local, tampoco existe en dicho colegio la
atención mínima del mismo ente director. En un segundo momento, se logra
evidenciar como, al querer aplicar la encuesta en algunos de las tiendas y
locales cercanos a la zona de los colegios, los mismos parecían en un inicio
interesados en desarrollar la misma, pero al momento de saber el tópico de la
encuesta, se negaban a responder las mismas y presentaban diferentes excusas,
permitiendo analizar de este modo, y gracias también al comportamiento
observado en una de las mujeres que aplico
la encuesta, un comportamiento nervioso, la probabilidad de existencia
del mismo expendio y consumo en dichas tiendas y locales. Y por último, se
analiza también como gracias a otro de los testimonios hallados en la zona del
colegio Escuela Nacional de Comercio, dicha problemática puede llegar a ser
vista desde un punto de rendición, a causa de las amenazas que son recibidas al
querer realizar diferentes estrategias para evitar dicho consumo y expendio, y
a lo incontrolable que puede llegar a ser la misma, tras la falta de acciones
por parte de las Alcaldías y las JAL.
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